¿Tienes claro lo que estás buscando?
En la pregunta que da título a este artículo podría resumirse todo. Si lo piensas bien, aunque pueda parecer compleja, realmente es bastante sencilla.
Y es que casi todas las personas somos excelentes especialistas buscando fallos, ajenos, eso sí, porque internamente nos cuesta más, mientras que para las oportunidades que la vida nos presenta solemos relajar esa búsqueda.
Un motivo, o una excusa, cada cual encuentra lo que busca, y siempre a través de unas expectativas que nos creamos, y creemos, previamente, por lo que son ellas las que ponen en marcha el botón de búsqueda.
Las cosas son como son más allá de lo que unas expectativas puedan hacernos intentar creer. Eso sí, aunque no hacen que todo sea como a nosotros nos gustaría, sí que consiguen cambiar la percepción que tenemos sobre cualquiera que sea la situación.
Mañana puede ser un día mejor o peor dependiendo de lo que esperemos de él. Y no me refiero al tiempo que pueda hacer, si no a lo que nosotros estemos dispuestos a hacer para que sea un modo u otro. En definitiva, a todo lo que depende exclusivamente de nosotros.
La mejor noticia de todas es que encontrar lo que busquemos dependerá en gran medida de nosotros, y aunque seguro que todas las cosas que ocurran no llegarán a satisfacer las expectativas que habremos puesto en él, el resumen final del mismo será muy parecido a lo que nosotros nos hayamos propuesto desde un primer momento.
Por eso, si existe una buena opción, esa es esperar siempre lo mejor y tener muy claro lo que queremos conseguir, porque entonces será cuando realmente nuestra búsqueda será mucho más productiva y positiva. Y es que siempre conviene recordar que, aquello que encontremos, también tendremos que gestionarlo, por lo que, cuanto mejor sea, muchísimo mejor.
José Lorenzo Moreno López
©jlml2021

Imagen: unsplash